Un análisis de la evolución temporal de temperatura media del verano (fig.1) desde el año 1971 respecto del periodo de referencia 1971-2000 revela un aumento, tanto en frecuencia como en intensidad, de las anomalías cálidas en las últimas décadas en todo el país. Los datos son, por tanto, consistentes con la percepción de que en verano cada vez hace más calor en toda España.

Analizando la variabilidad anual de la temperatura media estacional en España desde el año 1971 (fig. 2) se observa cómo las temperaturas medias de todas las estaciones son cada vez más elevadas, aunque el ascenso se aprecia con más claridad en primavera y, sobre todo, en verano. De ahí que el estudio concluya que el verano es la estación más afectada por el cambio climático, un verano que según los datos se ha vuelto cada vez más largo y más cálido.

¿Cuánto se está alargando la estación? Unos 9 días de media por década (fig. 3). El verano actual abarca prácticamente 5 semanas más que a comienzos de los años 80. Con todo hay que tener en cuenta la propia definición del concepto "verano ": vendría determinado por el periodo en el que temperatura máxima, durante 7 días consecutivos y a partir del 1 de mayo, iguala o supera la media de las máximas registradas entre el 18 y el 24 de junio del periodo 1981-2010 y el final del mismo se obtendría registrando el periodo en el que temperatura máxima, durante 7 días consecutivos y desde el 31 de octubre hacia atrás, es igual o superior a la media de las máximas registradas entre el 18 y el 24 de septiembre del periodo 1981-2010. De esta forma, que el verano dure 5 semanas más no implica necesariamente que comience en mayo.

Una forma de cuantificar esta tendencia a temperaturas cada vez más elevadas nos lleva a analizar la evolución de la clasificación climática de Köppen (basada en temperatura y precipitación y su distribución a lo largo del año) elaborada para tres periodos de referencia distintos (1961-1990, 1971-2000 y 1981-2010). El resultado (fig.4) es un claro aumento de la extensión de los climas semiáridos que se puede estimar en más de 30.000 km 2 (en torno al 6% de la superficie de España). Las zonas más afectadas son Castilla-La Mancha, el valle del Ebro y el sureste peninsular.

Existe un último ingrediente de análisis íntimamente vinculado a nuestra salud: la ocurrencia de olas de calor/frío (fig. 5). Investigando su evolución temporal, si bien los episodios fríos disminuyen, las olas de calor tienden a concentrarse en los últimos años, con especial incidencia en su duración. Este hecho es particularmente relevante, ya que existe una elevada correlación entre temperaturas máximas y mortalidad: a partir de un determinado umbral de temperatura máxima las muertes aumentan de forma notable. Según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, entre 2006 y 2017 han fallecido 83 personas por golpe de calor y entre 2004 y 2016, 446 personas por exposición al calor excesivo.

Fuente:

http://www.aemet.es/en/noticias/2019/03/Efectos_del_cambio_climatico_en_espanha#enlaces_asociados

http://www.rtve.es/alacarta/videos/el-tiempo/asi-seran-efectos-subida-oceanos-san-sebastian-cambio-climatico/5038638/